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Mariateresa Monaco
From: Italy
in: Australia

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He nacido en Nápoles el 1973 pero el dónde y cuando no dice mucho de mí.

Para explicar un poquito quién soy tengo que empezar del principio.

Soy crecida pasando muchísimo tiempo con mi abuela. Ella por mí ha sido un gran ejemplo de honradez y indiscutida fe en Dios. Ha sido una prueba viviente de la existencia de la Divina Providencia. Quedada viuda a 37 años con dos niñas no ha dudado nunca que Dios la habría ayudado. Y así' ha sido. Cuando necesitó dinero le llegó más trabajo, fue una óptima modista. Nunca ha dudado en compartir el poco que tenia con otros que necesitaron de ello. Ella era capaz de explicar el sentido de los sueños, creyó del mismo modo en lo visible que en lo invisible.

Mi madre ha heredado de ella una gran fe pero, siendo de otra generación, no la misma fe en la iglesia institucionalizada. ¡Cuando fue adolescente sintió la Presencia de lo Divino en cada cosa, vio la Luz brillar en todo sitio! Siempre ha estado muy abierta y curiosa, con un fuerte deseo de viajar para conocer otras culturas.

En mi padre quema la llama del buscador de la verdad. Sobre las repisas de la casa dónde soy crecida habian pilas de libros sobre la vida después de la muerte, los fantasmas, madam Blabasky, Dalai Lama, religiones del mundo y mucho mas. No ha parado nunca de buscar, preguntar y, cosa todavía más importante, de escuchar. Siempre ha sido un espíritu libre y un buscador.

Es de ellos que vengo y esto si que dice mucho de mi. Aquí es dónde mi viaje empezo’. Esto es lo que he heredado y he tenido la oportunidad de hacer mio, los primeros instrumentos para vivir esta vida y cumplir mi propósito: honradez, fe, mente abierta, curiosidad, necesidad de buscar – conocer - vivir la Verdad.

¿El lugar de dónde vengo dónde me ha empujado a ir?

Cuando tenia 14 años me he dicho: “la vida no puede ser solo esto, lo que ven mis ojos. ¡Nos tiene que haber algo mas, algo invisible, puedo sentirlo, percibirlo! ¡Tiene que haber algo mas, porque si así no fuera entonces esta vida no merece la pena de ser vivida!”

A 15 años he conocido a otras personas que la pensaban como yo. Buscaron y encontraron cosas interesantes. Me han contado de muchas cosas como por ejemplo: los egipcios y las pirámides, los mayas, los piel rojos, el trabajo de Castaneda, los ángeles, las líneas energéticas y mucho más. Un día, yendo a encontrar a estos amigos, he visto en jardín a un joven hombre que leia el periódico y me he dicho: “¡Aquel hombre es interesante, quiero conocerlo!”. Y así ha sido. Hablo de mí, hablo al singular, pero todo lo que he vivido y he logrado no lo he hecho sola. De aquel día en adelante el me ha acompañado, me ha dado total soporte, ha nutrido mi Ser, animado la expresión de mi espíritu, empujándome a ir cada vez más dentro, adelante y para arriba. Siempre ha creído en mí y me ha querido totalmente. Él ha sido mi mejor amigo, mi hermano y mi compañero, junto hemos caminado, hasta muy recientemente, esta vida rica de aventuras. De seguro no estaría aquí si no fuera por él. ¡Gracias Salvatore!

Y en efecto es gracias a él que unos dos años después he encontrado la respuesta a mis ruegos.

En el 1990 he encontrado “locos” que la verdad, no solo la habian buscada y averiguada, también la llevavan a la práctica. Nutrieron el ser interior, dieron espacio y voz a la expresión de la luz interior, enlazándose con lo que esta adentro y lo que esta arriba. Pero la cosa que fue por mí más importante y extraordinaria fue la total coherencia e integridad de estas personas. ¡Lo en que creian, sus palabras y sus acciones (he sido testigo de ello) siempre han sido una sola cosa! ¡Y, como si éste no bastara! llevaron con si' un sentimiento real de familia. Pude sentir, respirar, saborear el sentimiento de hermandad. Compartiendo los momentos felices y tomándome por mano para superar los tiempos difíciles. Haciendo junto acciones reales y no dándome nunca la oportunidad de dudar ni por un según: “¡que somos hermanos, somos una familia!”

De aquel momento en adelante he vivido experiencias maravillosas y he viajado un poquito.

He ido en Francia, cercano de París, dónde he quedado por unos tres meses trabajando y leyendo. ¡Recuerdo que siempre tuve frío y hambre, los franceses comen tan poco con respecto de los italianos! Pero fui feliz, manteniendo mi atención concentrada sobre las maravillas de mi relación con el Creador, mi Padre. No pude hablar con nadie porque no hablaba francés y mi inglés era igual a cero. Así he pasado todo mi tiempo libre leyendo, escribiendo, dibujando y trabajando sobre mí misma.

Después he vuelto a Italia y he ido a vivir a Montefalcone, un pequeño país de montaña 80km cerca de Nápoles. Elli’, junto a otros hermanos y hermanas, hemos vivido, soñado, hemos superado altos y bajos, hemos aprendido a aceptarnos, y querernos, a pasar de todo, unidos por un objetivo en comun: construir un centro por el crecimiento espiritual, el despertar de la conciencia, la evolución del ser humano. He vivido una experiencia increíble, difícil de describir con palabras. ¡He aprendido muchisimo! Y, creo y espero, he conquistado una hermandad tan fuerte con algunas personas que todavía siento hoy parte de mí.

Un bonito día algunos hermanos vinieron del sur america. Axis, un grupo de danza de Venezuela, ha estado con nosotros por muchos meses. Ha sido maravilloso vivir junto todo, a veces llegamos a ser veinte personas o más. Después de dos espectáculos en Nápoles, después de haber compartido mucho, entregado y recibido ellos decidieron moverse y así también yo hice.

Fui a Israel para vivir la experiencia del kibutz. Alli’ encontré jóvenes de cada parte del mundo. He aprendido muchísimo, soy crecida y maturada, he abierto mí miente a otras culturas, modos de vivir, pensar, actuar, percibir. Pero un día empece’ a oír la voz de mi madre que me preguntaba de llamar a casa. Supe así que mi padre tuvo que someterse a una intervención quirúrgica al corazón y entonces tome’ el primer vuelo para volver a casa. ¡La operación quedó bien, mi padre es más fuerte que antes! Pero a este punto no sabia que hacer.

Vivi’ sola un invierno en una casa fría y aislada cercano de Nápoles. Recuerdo que cada tarde miraba el fuego en la chimenea y me preguntaba cuál fuera mi próximo paso. ¡Rompí hasta el tv porque era una diversión! Por fin en abril tome’ la decisión de ir a Londres dónde he vivido por cuatro años. Dos hermanas del Perú han vivido conmigo por algún tiempo, fueron empeñadas en la publicación de un libro, el “Código del Amor”. He ayudado un poquito con la corrección de las pruebas y he gozado de la oportunidad de compartir una vez más, de crecer, de aprender y despertar. El libro fue publicato y así ellas se fueron y, después de algún tiempo, también yo me fui.

¡Fui en Gran Sabana en Venezuela o, mejor dicho, en el medio de la nada! ¡El vecino más cercano estaba a tres kilómetros, el país más cercano estaba a sesenta kilómetros, que pudiera haber sido sólo una hora en coche si hubiera la calle! ¡He vivido en la casa de un hermano, llámarla casa es muy optimístico, no habia agua, baño, gas o electricidad! Es un sitio muy especial para conectarse con el interior y lo alto. Alli’ he quedado unos ocho meses, traduciendo libros del español al italiano, escribiendo, dibujando, preguntando y recibiendo respuestas. Ha sido una experiencia que me ha inspirado, dado fuerza y mucho, mucho más.

Después he ido en Italia y luego he ido a Mallorca, dónde he sido abrazada por hermanos y hermanas y dónde he vivido cinco intensas y bonitas semanas. Pero Inglaterra, que habia sido tan buena conmigo, me faltaba.

Y así he vuelto a Inglaterra y me he instalado, por cuatro años, a Bath. Alli’, después de dos años sin comunicar con amigos, hermanos y parientes, he abierto mi casa a quien quieria intercambiare. Ha sido un período intenso. Por unos dos años he tenido, casi siempre, alguien en casa conmigo, que me recordara el camino elejido, las cosas que son importantes y verdaderas por mí y, de este modo, me ha ayudado a quedar despierta, a no identificarme con el “día tras día” (la routina) y a dar sentido a mi vida; alguien que atender - servir, a quien dar mi más alta atención, con cuyo compartir mis conclusiones y mis preguntas. Ha sido una experiencia maravillosa y satisfactoria. En este período he conquistado, así creo, amigos y hermanos con que contar.

Después de cuatro años mi tiempo en Inglaterra acabo’. Y así me he meti’ en el coche y me fui a Menorca donde pase’ el verano. Con el invierno a las puertas me movi’ otra ves.

¡De nuevo a Nápoles! He encontrado un trabajo que me ha dado la oportunidad de viajar en Vietnam y China a menudo, alli’ he quedado hechizada por la raza amarilla que por mí es fascinante. He continuado este trabajo y los frecuentes viajes a Asia aunque después de unos dos años me he desplazado a Menorca, dónde, gracias a Francisco, un joven hombre muy especial, he aprendido mucho sobre las emociones y relaciones.

Después de un período difícil sentí la necesita de tener mi familia cercana, para nutrir mi Ser interior, para tomarme por mano y ayudarme a superar la dificultad de la situación que vivia y hacer un gran cambio en mi vida. Así he ido a Melbourne, Australia para estar con Maurizio e Ilvana. ¡Han sido por mí como una “sala de reanimación”, me han dado oxígeno, me han sustentado y me han quidado con extrema atención y amor, y siguen haciéndolo!. Ahora siento tener bastante fuerza para respirar sola y para producir oxígeno. El momento peor ya paso’, me he casado y estoy lista para vivir nuevas experiencias de evolución y elevación.

Creo de tener mucho que compartir, mucho para aprender y entregar.

¿Que hago con lo que tengo si no lo doy a otros?

¿Cómo hago a seguir creciendo sin mis hermanos y hermanas?

Mi sueño: ¡quiero una familia sin límites o barreras, una familia muy grande!

¿SI NO LO HAGO YO, ENTONCES QUIÉN?

¿SI NO LO HAGO AHORA, ENTONCES CUÁNDO?.

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